Parque Cultural Sierra de Gata

Para entrar en la SIERRA DE GATA el viajero debe dejar las prisas en casa o no podrá disfrutar del entorno como se debe. Nos adentramos en una comarca donde la historia no es un grabado inerte labrado en piedra sino todo un vivo legado cultural. Su posición fronteriza, no solo con Portugal, sino también entre los bandos cristiano y musulmán durante la edad media y entre Castilla León y Extremadura, hacen que la Sierra de Gata, más que un paisaje, sea un parque cultural por derecho propio: en sus 1.300 kilómetros cuadrados acoge seis conjuntos históricos, tres castillos, una lengua propia, la Fala, y la fiesta medioambiental más antigua del mundo.

Ya desde la prehistoria los primeros seres humanos dejaron su legado en forma de DÓLMENES como el de Hernán Pérez o las INSCRIPCIONES ROMANAS de Villamiel, los ejércitos cristianos construyeron los CASTILLOS DE ELJAS, TREVEJO Y SANTIBÁÑEZ EL ALTO pero también tuvieron tiempo para el descanso, como demuestra la Casa del Rey que Alfonso XI tenía en Cadalso y que usaba como residencia durante sus cacerías por la comarca, aunque si hacemos caso a los rumores, en realidad era su nido de amor para encontrarse con su amante, Leonor de Guzmán.

Los viajeros pueden emular al antiguo rey; ya sea para una escapada romántica o para disfrutar de unas jornadas de caza, pesca, senderismo u observación de aves. En la zona existen multitud de alquerías y casonas reconvertidas en alojamientos rurales que ofrecen relax, intimidad, descanso y BUENA GASTRONOMÍA entre cuyos manjares no faltan el ACEITE con denominación de origen Gata-Hurdes, buenos VINOS DE PITARRA o las carnes de “WAGYU IBÉRICO” criadas en las faldas de la sierra.

Cabe destacar dos hechos singulares de la Sierra de Gata. El primero es que conserva una lengua muy especial, A FALA, cuyos orígenes se remontan a la reconquista y que bebe del gallego, el portugués y el castellano y de las particularidades de siglos de historia para conformar un lenguaje único y colorido. La segunda es que acoge la fiesta medioambiental más antigua del mundo, la FIESTA DEL ÁRBOL EN VILLANUEVA DE LA SIERRA, declarada bien interés cultural en 2016 y que cada febrero desde hace más de 200 años nos recuerda la importancia de cuidar nuestra naturaleza con la siembra de cientos de nuevos árboles que sigan siendo testigos de la historia de esta comarca.

Bonos de Sierra de Gata